El pasado mes de Abril comenzamos a realizar una nueva campaña de exploraciones en el Polje de la Nava.
Después de realizar un último ataque al Pozo del Escaramujo, que al final no nos ha permitido progresar en la cavidad, desplazamos nuestros trabajos a la Sima de la Dolina.
Después de realizar un último ataque al Pozo del Escaramujo, que al final no nos ha permitido progresar en la cavidad, desplazamos nuestros trabajos a la Sima de la Dolina.En esta cavidad ya realizamos algunos trabajos de exploración durante 2.006; aunque hemos regresado a ella con el objetivo de llevar a cabo diversas desobstrucciones que nos permitieran localizar la continudad de la cavidad.
Hasta ahora, hemos alcanzado una estrecha diaclasa, después de descender un estrecho pozo y donde se han dejado pendientes las labores de desobstrucción.
Asi mismo hemos regresado al Sumidero de Tom, una cavidad en la que se realizó una primera exploración alla por el año 1.995, pero en la que no se obtuvieron los fines deseados.
Este sumidero y por los relatos del propietario de la finca era la perdida total de un arroyo que se intruduce por su boca.
Los nuevos trabajos de exploración se han destinado a la desobstrucción de una estrecha gatera que da acceso a la cabecera de un pozo de 10 metros. Tras este un sistema de galerías descendentes, de amplias dimensiones nos conduce hasta una estrecha diaclasa que parece conectar con una sala inundada.
Esta dicalasa es donde actualmente estamos desarrollando diversas labores de desobstrucción, en la que hemos empleado los últimos tres fines de semana, con el objetivo de continuar en la exploración de la cavidad.
Hemos comenzado las labores de topografía de la cavidad y arroja ya una profundidad de -30 metros, hasta la diaclasa final que conecta con la zona inundada.
Los resultados son más que esperanzadores y esperamos continuar con los trabajos en el Sumidero en próximas fechas.
Fotos: Rafael Martín de los Santos y Diego Mendoza
